martes, 2 de marzo de 2010

¿No hay comparaciones mejores?

De un análisis publicado en La Vanguardia de hoy. Sin comentarios.

3 comentarios:

Clochard dijo...

guarda paralelismos... el escenario era dantesco... se produce una sensible mejoría...

José María dijo...

Es bastante triste encontrarse con comentarios desafortunados sobre este tema, y no hace falta que mentemos a Willy Toledo.

Hace cinco años, volviendo de Miami, coincidí con un cubano. Él se sentaba en el pasillo y yo en ventanilla, pero cada cual teníamos a nuestra disposición dos o tres asientos libres. Después de cenar, charlamos un poco. Cada cual sacó su petaquilla (él de ron, yo de whiskey) y nos tomamos una copa. Él me preguntó: "¿Sabes cómo se llama eso?", en referencia al combinado de licor y Coca Cola. "Sí, claro, un cubata, un cuba-libre", respondí. Entonces él sonrió y me replicó: "No, eso es una mentirilla".

Clochard dijo...

A mí me parece que la cárcel donde murió Orlando Zapata se debe de parecer a la cárcel donde han muerto otros cubanos. Esto de tomar a los Estados Unidos como referencia del mal absoluto me suena a cosa de ex-comunista. Me parece más lógico a la inversa; sugerir la malignidad de una cosa por medio de su comparación con el castrismo. Creo que cualquier persona que haya visto el juicio a Arnaldo Ochoa pensará parecido.