Dos caras

Evening Standard, 19 de septiembre de 2023

Rediseño bien vendido para Clarín

Ayer 

Hoy

Hoy Clarín estrena diseño un poco más británcio. Aquí la nota el el diario de hoy. Como hace años, es un trabajo del estudio Cases de Barcelona, ahora TRIC Media, por las iniciales de Rafael Klappenbach, Iñaki Palacios y Chico Amaral.

[clic en la imagen y se agranda mucho]

Ahora –aquí abajo– pienso que es un diseño completamente innecesario, de esos que te venden como imprescindibles. Clarín no se lee mejor con esta tipografía exclusiva, que es tan exclusiva como la anterior, provista por el mismo estudio. Tampoco es necesario el cambio en la cabecera del muñequito tocando una corneta. Un negocio, como tantos de este tipo, para quienes lo cobran, que son buenos en diseño, pero sobre todo son excelentes vendedores y no solo de diseño.

La muerte de Botero en El Espectador

Ayer

Hoy

Puede ser el pixelado más estúpido de la historia

Como si fuera una predicción el post anterior, hoy sale a la calle esta portada del ABC de Madrid, que presenta a Antonio, pixelada su cara para que no se lo reconozca, pero bien nítido su brazo tatuado como para que sí se lo reconozca. 

La tontería de borronear algunas fotos

En la portada de Clarín de hoy se publica la foto brlueada (pixelada) del sospechoso de un asesinato. La pregunta es qué razón tienen para hacerlo, ya que si no se puede publicar la foto de un sospechoso, no deberían publicarla. Van otras tres razones que creo suficientes para demostrar que es una tontería hacer esto.

1. Jamás publicarían una foto con defectos, en la que no se distingue bien la cara de la persona fotografiada. En este caso son ellos mismos quienes han estropeado la foto, pero para publicarla.

2. A pesar de pixelar la foto, se distingue casi perfectamente a la persona. Y si no, se distingue a un tipo humano completo, que quedaría involucrado por pixelar la foto.

3. Se borronean las fotos de las personas inocentes –como los menores de edad– que aparecen en fotos colectivas en las que interesan las caras de los protagonistas. Nunca se borronean las caras de los protagonistas, ya que si no se pueden publicar por alguna razón, no se publican y se acabó la historia.