martes, 5 de julio de 2011

Los sanfermines, el autoritarismo y la Fundéu


Recibo todos los días varias veces recomendaciones como la que ven arriba [clic > amplía] de Fundéu, la Fundación de Español Urgente, patrocinada por el BBVA (Banco Bilbao Vizcaya Argentaria). Las recibo varias veces porque me las envía la misma Fundéu a raíz de una pregunta que hice en su momento, pero también me las manda ADEPA (Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas) que reenvía las de la Academia Argentina de Letras. Además recibo tuits y retuits repetidos y requeterrepetidos. Como me gustan las cosas del idioma, aprendo que los prefijos de deben escribir junto al vocablo que califican, que no se debe decir computer ni mouse y tonterías por el estilo, todas muy bien dichas, con mohines de Maestro Ciruelo. Estoy exagerando la hipérbole, porque es verdad que me han sacado de algunas dudas que todavía tengo al escribir o al hablar. Además es probable que la utilidad sea mayor en otras personas.

Pero confieso que la insistencia de Fundéu me tiene ya un poco cansado. No hay nada más democrático que la lengua: la hacen los hablantes a fuerza de hablar y escribir y no hay poder capaz de evitar la formación de nuevas palabras si la lengua está viva.

La pretensión de corregir todo el día a los hablantes y escribientes es por lo menos autoritaria. Todos los dictadores se han metido con la lengua de sus súbditos: han prohibido idiomas, dialectos y extranjerismos, han suprimido palabras del diccionario y hasta han obligado a usar algunas aunque no gustaran, como si fuera aceite de ricino. En estas épocas de tiranuelos americanos, las recomendaciones de Fundéu me empiezan a reventar la paciencia: Que no se dice así, que debe decirse esto o lo otro. Que se ha vuelto habitual en muchos medios decir que nosequé... Pareciera que nos están vigilando: alguien lee lo que escribimos y al rato manda un comunicado como este:
Fundéu BBVA en la Argentina: «Diccionario biográfico español», no «Diccionario Biográfico Español»

La Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) en la Argentina recuerda que los títulos de obras de creación solo se escriben con inicial mayúscula en la primera palabra y los nombres propios.

En numerosas noticias referidas a la polémica que ha suscitado el Diccionario biográfico español, publicado por la Real Academia de la Historia, el título de la obra aparece con grafías inadecuadas: «La RAH está dispuesta a rectificar el polémico Diccionario Biográfico Español»; «Cultura insta a que se revise el controvertido 'Diccionario Biográfico Español'»...

Los títulos de las obras de creación —libros, películas, cuadros, esculturas, piezas musicales, programas radiofónicos o televisivos... — se escriben, como recuerda la reciente Ortografía de la lengua española, en cursiva y con inicial mayúscula solo en la primera palabra y en los nombres propios, si el título incluye alguno: «Cien años de soledad», «La decisión de Sophie», «El nacimiento de Venus»... (en cursiva)
Para más complicación resulta que han lanzado el Manual de Estilo para nuevos medios. Loable iniciativa si no fuera que quieren igualarnos a todos: no estoy en contra del manual de estilo, pero sí estoy en contra -y rotundamente- de que haya uno solo.

¿Me quieren decir cómo apareció en el diccionario la palabra sanfermines, que ahora recomiendan escribir en minúscula y toda junta? Claro. No había Fundéu. Y cuando no había ni Fundéu ni internet, los que sabían escribir lo hacían muy bien, como ahora. Solo espero que todo esto no sea una excusa para sacarle dinero al BBVA con el pretexto de mejorar el periodismo: prefiero que el BBVA me pague mejores intereses...

Los que viven de los errores son como los guardias de seguridad o los bibliotecarios. Viven de la inseguridad y del robo de libros, por eso les conviene que sigan existiendo -y hasta que aumenten- esos flagelos. Con la Fundéu puede pasar lo mismo: aumentarán los errores en la medida en que ellos los señalan (aumentarán porque los señalan) y así harán más necesaria su propia existencia.

El mundo era feliz, mucho más feliz, cuando no había semáforos, alambradas, detectores de asesinos en los aeropuertos, fronteras, cintas métricas, balanzas ni diccionarios.

12 comentarios:

María B. dijo...

Querrá decir Manual de estilo, con mayúscula solo al inicio, ¿no? ;-)

Gonzalo Peltzer dijo...

Uy, perdón Fundéu ¿me sancionarán?

María B. dijo...

Por lo que he visto en su último post, sí. Caramba para la Santa Fundación ¡Y viva la libertad de disensión!

User dijo...

No me banco el dedito levantado de la RAE ni de la Fundéu, tampoco les reconozco mayor autoridad. Más me aflige la mente colonizada que a veces tenemos en el Río de la Plata. Pero se dice maestro Siruela, no maestro Ciruela.

Gonzalo Peltzer dijo...

Gracias Sebastián, me la dejás picando...

No es lo mismo Maestro Ciruelo (así está en el post) que Maestro de Siruela. El primero fue Pedro Ciruelo, sabiondo del siglo XVI, por quien se acuñó la frase "sabe más que el Maestro Ciruelo". El otro menta al maestro del pueblo de Siruela, el que no sabía leer y puso escuela. El Maestro Ciruela es la mezcla mal sabida y más impuesta de los dos. A mi me gusta decirle Maestro Ciruelo a los pedantes que saben y de Siruela a los no saben pero se creen que saben.

Anónimo dijo...

ok, entendi. la felicidad se mide por la existencia o no de los semaforos, los alambrados o los diccionarios.

al carajo con años de filosofia existencial y aquello de que la felicidad es lo que uno logra no lo que uno desea. adios nieztche, adios guatari, deleze, goodbye a años de escuela filosofica alemana y francesa.

Asi hablo el semaforo.
El ocaso de los diccionarios.
La balanza y la socialogia del poder.
por supuesto, todos libros fundantes de la nueva filosofia argentina del bar de la esquina.

los semaforos o su existencia o no, son la medida de la felicidad del mundo.

increible.

Toni Piqué dijo...

Metáfora. (Del lat. metaphŏra, y este del gr. μεταφορά, traslación).
1. f. Ret. Tropo que consiste en trasladar el sentido recto de las voces a otro figurado, en virtud de una comparación tácita; p. ej., Las perlas del rocío. La primavera de la vida. Refrenar las pasiones.
2. f. Aplicación de una palabra o de una expresión a un objeto o a un concepto, al cual no denota literalmente, con el fin de sugerir una comparación (con otro objeto o concepto) y facilitar su comprensión; p. ej., el átomo es un sistema solar en miniatura.
~ continuada.
1. f. Ret. Alegoría en que unas palabras se toman en sentido recto y otras en sentido figurado.

Véase también: ¿Qué piensa este blog?

Gonzalo Peltzer dijo...

Gracias TP y Anónimo también, por provocar. El párrafo de Marías es buenísimo. Ya casi lo tenía olvidado.

Anónimo dijo...

mi idea no es provocar, en lo mas minimo. a libertad de publicacion, libertad de critica.

tomando las deficiones que usted entrega y se agradece, como metafora es retorcida. es una traslacion, tropo figura, en donde en este caso no hay sustitucion de un signo, diccionario, por otro que comparte con el primero, diccionario, algun o al menos un rasgo semantico con otro signo y no encuentro dicho rasgo en ningun caso, por que la comparacion es vida, felicidad, diccionario, semaforo, infelicidad no se apoya ni en relaciones ni en analogias con otro signo o al menos no fue enunciado antes en ese mismo parrafo.

y en cuanto tropo, la combinacion es inconcistente como idea. con solo realzar o exagerar una percepcion y tratar de realizar un constraste, no lleva a la comparacion de signos o ideas.

si es metafora para usted. haya usted. tal vez sea otra figura retortica, que habria que definirla, pero como metafora es de minima descutible y no lo es.

las metaforas no son un cajon de sastre donde toda comparacion cabe como sentido figurado. sobre todo los ejemplos de diccionario, que tanto su companero detesta, son mejores que la cabriola retorica que el intento en el texto.

es mi humilde opinion.

Gonzalo Peltzer dijo...

Chuta, cuando me hice bloguero no sabía que pasaría por estas angustias.

User dijo...

Gracias por lo de Ciruelo y Siruela. No sabía y opiné; es decir, sería el primero.

Gonzalo Peltzer dijo...

Gracias a vos Sebastián, pero me la dejaste picando...