jueves, 22 de noviembre de 2012

Desierto de participación ciudadana

A news desert is a community whose sources of original reporting have dried up entirely, or are diminished to the point where they can no longer fill the information needs of the communities they serve...
...dice Tom Stites, el fundador de un proyecto para desarrollar cooperativas de noticias on line. Antes probó que las localidades que perdieron sus periódicos de papel se vuelven menos participativas: vota menos gente en las elecciones, hay menos candidatos, menos personas se involucran en la solución de los problemas de su comunidad. Un desastre... o un desierto. A estas y otras conclusiones llega Jessica Bruder en este artículo del Christian Science Monitor después de dolerse con el cierre parcial del Times-Picayune de Nueva Orleáns (aquí en Paper Papers). Es curioso (o paradójico) que el CSM cerró hace ya cuatro años sus ediciones de días de semana. El concepto desierto de noticias puede ser terrible si se suma a la actual tendencia hacia regímenes autoritarios en nuestra América... la del sur, digo, porque más que de noticias significa desierto de participación ciudadana. Cuando se acaban los periódicos, alguien los reemplaza en su función de construir la comunidad y cita Bruder el caso de The Lens, un sitio de noticias mantenido con donaciones que nació a la sombra de la crisis del Times-Picayune. Al final del artículo se pregunta Bruder si los periódicos dejan de ser relevantes cuando no hay comunidad o es que la comunidad deja de ser relevante porque no hay periódicos. No sé qué contestar. Solo sé que los periódicos y las ciudades están unidos por una alianza fenomenal que los lleva a padecer los unos las crisis de los otros. El Times-Picayune de Nueva Orleáns es apenas un botón de muestra. Y los periódicos que pactaron con el poder político en nuestra América, son, cada uno de ellos, otro botón de ese traje. Gracias a SSE, que me envió el artículo de Jessica Bruder en el CSM.

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