viernes, 13 de septiembre de 2019

elescolar.es


Hoy publica Ignacio Escolar las normas de opinión de eldiario.es. Celebro que lo hagan, pero quiero, además, decir un par de cosas después de estos dos párrafos introductorios que copio:
¿Vale todo en la opinión? ¿Todos los puntos de vista merecen la misma difusión? ¿La libertad de expresión justifica la calumnia o la mentira en los medios de comunicación? En eldiario.es creemos que no: que los artículos de opinión en prensa también tienen que cumplir con unas normas deontológicas. Con un código que debe ser transparente, tanto para los lectores y socios como para los articulistas que publican en nuestras páginas. Es este decálogo que os presento hoy, que he elaborado durante este verano, consultando con gran parte del equipo de eldiario.es y con nuestros articulistas.

Son unas normas que ya estábamos aplicando de manera informal, que hasta ahora no estaban por escrito y que queremos establecer de forma más rigurosa. A lo largo de la historia de eldiario.es hemos publicado puntualmente algunos artículos de opinión que incumplían estas normas deontológicas. Pero el objetivo de este decálogo no es corregir el pasado sino mirar al futuro, y mejorar nuestra sección de Opinión con normas claras y transparentes.
1. Escolar debiera cambiar ya el nombre de eldiario.es por elescolar.es. Es que no se puede ser tan yo-me-amo.

2. Tiene tal ensalada con el dialecto inclusivo que, por ejemplo en el punto 10, dice que los articulistas y los lectores son solo varones, una discriminación imperdonable y oscurantista si no acepta lo de la ensalada.
10. Al igual que los autores y autoras de cada opinión ejercen su derecho a la crítica, también se someten a las críticas en los comentarios, pero no a los insultos, calumnias o descalificaciones personales. La opinión está abierta a la colaboración de nuestros socios y socias. No solo en los comentarios: también pueden enviarnos sus artículos siguiendo estas instrucciones. Las normas que aplicamos a nuestros articulistas también son aplicables a los lectores, donde pedimos la colaboración de los socios y socias para moderar aquellos comentarios que las incumplan y generar un espacio de debate plural y respetuoso.